¿Qué es y cómo se transmite?

Las encefalitis equinas (EE) constituyen un grupo variado de enfermedades virales transmitidas al ser humano por artrópodos. A partir de la detección viral en caballos, es que llevan el nombre de “Equina”. Es una enfermedad frecuente entre habitantes de las áreas rurales.

La enfermedad es transmitida por picadura de mosquitos infectados.

Los caballos se enferman, pero no transmiten la enfermedad.

Los humanos no transmiten estos virus a los mosquitos.

Síntomas

El período de incubación varía de 2 a 10 días.

Las enfermedades causadas por el virus de la Encefalitis Equina del Oeste van desde cuadros leves (cefalea, fiebre) hasta meningitis aséptica y encefalitis.

Presenta un comienzo súbito con dolor de cabeza seguido de:

• Decaimiento
• Escalofrío, fiebre
• Mialgias y malestar general.

Las manifestaciones neurológicas aparecen al cabo de varios días y pueden incluir:

• Letargo
• Somnolencia
• Rigidez de nuca
• Fotofobia y vértigo
• Debilidad y temblores generalizados.

Generalmente la mejoría comienza varios días después de la defervescencia, entre 1 semana a 10 días.

Ante la presencia de estos síntomas recuerde no automedicarse y consultar con el centro de salud o profesional de la salud más cercano.

Prevención

La medida de prevención más recomendada es el saneamiento ambiental de los predios donde se alojan caballos y personas asociadas a la actividad rural o al cuidado y a trabajo con dichos animales.

Las medidas de prevención incluyen:

• El drenaje o vaciamiento de cualquier espacio o elemento que acumule agua.
• Desmalezado, limpieza y mantenimiento del césped corto, en predios verdes para disminuir la presencia de mosquitos adultos.

¿Qué hacer frente a un caso de EEO?

Frente a un caso sospechoso o confirmado de EEO en equinos, además de las medidas anteriormente mencionadas, se recomienda:

• La protección de las personas que trabajan o viven en las inmediaciones del lugar donde se aloja el caballo enfermo.
• Uso de ropa de trabajo clara y de manga larga.
• Utilización de espirales en el exterior y pastillas o aerosoles en el interior de las edificaciones.
• Aplicación periódica de repelentes de insectos. Volver a aplicar el producto periódicamente cada 3 horas.
• Colocación de telas mosquiteras en puertas y ventanas de recintos de animales y viviendas.

Fuente: Ministerio de Salud de la Nación.